Tendencias en el sector industrial para 2021

Responsable de más del 16% del PIB mundial, el sector industrial es clave en este mundo post-COVID marcado por la crisis. Sin embargo, son muchos los retos que dificultan su impulso en España. Retos externos, como la propia pandemia, el Brexit o la redistribución manufacturera global; e internos, como una excesiva dependencia de sistemas propietarios y las operaciones en silos.

A continuación, analizaremos en detalle cuál es la situación actual con el objetivo de trazar las líneas a seguir en los próximos meses para desbloquear la resiliencia, impulsar la productividad y atraer el mejor talento a la industria. Más aún, para transformarse y volver a liderar el camino del crecimiento sostenible.

La tecnología dará forma a las fábricas del futuro

La tecnología está transformando radicalmente las cadenas de valor y la producción. Estamos pasando de líneas de producción especializadas que producen grandes volúmenes de un mismo producto a otras digitales, flexibles y mucho más sensibles que permiten que cada producto pueda fabricarse a medida según las especificaciones del cliente. El cambio es tan grande, que se prevé que, en los próximos 5 años, las fábricas inteligentes sumen a la economía hasta 1,25 mil millones de euros. Esto es así porque hacen posible que las plantas produzcan más con menos.

Para mantenerse ágiles y competitivas en este entorno marcado por la volatilidad, las empresas del sector industrial apostarán por las nuevas tecnologías digitales, lo que les brindará mayores eficiencias, productividad y sostenibilidad y les ayudará a reducir el coste general de producción. Como ejemplo, las soluciones EcoStruxure de Schneider Electric permiten a las compañías del sector industrial reducir cerca de un 30% de CAPEX y un 28% de OPEX, incrementar en un 22% la disponibilidad de los equipos y reducir un 15% los problemas de calidad.

Hablamos de fábricas del futuro, pero ya son una realidad. Como la Smart Factory de Schneider Electric en Lexington, Kentucky, que, recientemente, ha obtenido la distinción de la cuarta revolución industrial (4IR) Advanced Lighthouse de manos del Foro Económico Mundial, la tercera planta de la compañía en recibir este honor por el éxito en la adopción de tecnologías 4IR a escala con beneficios demostrados hasta la fecha.

La automatización favorecerá la creación de nuevos puestos de trabajo

Durante las recesiones económicas es habitual que exista una cierta ansiedad por la automatización, a la que, tradicionalmente, se ha vinculado al peligro de perder puestos de trabajo. Sin embargo, la realidad es otra. El Foro Económico Mundial estima que, durante la próxima década, hasta un tercio de los trabajos podrían estar en riesgo de automatización y que más del 42% cambiará radicalmente. Pero a la vez, la misma organización, prevé la creación de 133 millones de puestos de trabajo y la transformación o un profundo cambio en 75 millones. Es decir, se crearán más puestos, y de mucha más calidad de los que se perderán.

La tecnología libera a los trabajadores de las tareas más repetitivas y los empodera para que aporten más valor con capacidades imposibles de asumir por las máquinas, como la imaginación, el razonamiento, el juicio o la improvisación. Además, les permite tomar mejores decisiones y les da mayores oportunidades de desarrollo profesional al pasar de operadores a supervisores. Sin olvidar que la automatización facilita la supervisión y la gestión remota de las operaciones, algo básico a la hora de asegurar la continuidad del negocio, especialmente en momentos como el actual.

Es cierto que los trabajos del futuro serán distintos y requerirán nuevas habilidades y capacidades de las personas, pero no debe verse como algo negativo, ya que, al final, la automatización industrial ayuda a retener y atraer talento al territorio, facilita el intercambio de conocimientos, la innovación y crea nuevos puestos de trabajo mucho más resilientes.

Avanza la transformación digital de las PYME

Las PYME, aunque a menudo se pasen por alto, son la columna vertebral de nuestra economía y de su éxito depende el crecimiento económico y la productividad mundial. Apoyar su competitividad nos permitirá crecer de forma más sólida, equilibrada y sostenible – según McKinsey, reducir a la mitad la brecha de productividad global entre las PYMES y las grandes empresas supondría el 7% del PIB mundial.

Las PYME deben invertir de forma inteligente para lograr un crecimiento sostenible a largo plazo. La clave es la digitalización, que les permitirá hacer más con menos y acceder a nuevos mercados, habilidades y herramientas. También colaborar más y, en definitiva, crear modelos de negocio más innovadores, rentables y sostenibles.

A menudo se ha visto el coste de digitalizar y el conocimiento tecnológico que requiere como barreras para la transformación de las PYMES, pero la digitalización, en realidad, es un gran nivelador de negocios que permite a las pequeñas empresas competir con los más grandes, poniendo a disposición del mercado su un enfoque más mucho más personalizado y adaptado.

Apostar por los estándares se convierte en una prioridad

Los estándares abiertos han transformado el entorno IT, al permitir que los sistemas y dispositivos se comuniquen entre sí y proporcionen datos que impulsen la inteligencia y la automatización. La industria debe tomar ejemplo y adoptar rápidamente estándares abiertos universales.

Los estándares son la clave para desbloquear el flujo de datos, la innovación, la productividad, la eficiencia y el retorno de la inversión (ROI) en el sector industrial. Su introducción permitirá a los fabricantes de maquinaria, integradores y usuarios finales crear soluciones de automatización conectando las mejores aplicaciones y utilizando herramientas gráficas, que no requieren de código, habilitadas por estándares como el IEC61499.

Un buen ejemplo de ello es EcoStruxure ™ Automation Expert de Schneider Electric, el primer sistema de automatización agnóstico centrado en software. Construido sobre los principios de la automatización industrial, permite resolver los retos de planta o máquina a lo largo de todo el ciclo de vida operativo.

La trazabilidad, pilar del segmento de la Alimentación y las Bebidas

Si nos fijamos en el sector agroalimentario, clave en la industria española, el consumidor actual exige más información acerca de los alimentos que consume, su impacto ambiental, su origen, su composición, etc. Además, los fabricantes cada día se enfrentan a normativas más estrictas en materia de etiquetado de productos y seguridad alimentaria. Poder satisfacer estas demandas pasa por disponer de una trazabilidad de extremo a extremo que facilite información del producto y del proceso, garantizando aportar un valor diferencial a un mercado cada vez más exigente.

Pero la automatización va más allá. Las empresas industriales juegan un papel muy importante en la lucha contra el cambio climático y, por eso, deben reinventar la sostenibilidad incluyendo la reducción de residuos. Para ello necesitan cuantificar el desperdicio de alimentos – se estima que hasta el 50% de los alimentos del mundo nunca son consumidos - y poder rastrear los productos a lo largo de toda la cadena de suministro. Se trata de una tarea compleja por la gran variedad de actores que implica, pero que, gracias a la tecnología, es posible.

Ejemplo de ello es la aplicación 'Trazabilidad total de extremo a extremo', desarrollada de forma conjunta por Schneider Electric, Microsoft y otros actores del sector, que permite a los clientes seguir el viaje de los productos de extremo a extremo mejorando la transparencia y la confianza en la marca.

Como demuestran las tendencias observadas, la transformación digital de la industria impulsa la capacidad de las empresas de alcanzar sus objetivos. De negocio, pero también de sostenibilidad e innovación. Sin embargo, un cambio incremental no es suficiente. Para desbloquear el impacto de la cuarta revolución industrial es necesario desafiar el statu quo. Repensar la industria requiere movimientos hacia una estandarización e intercambio de datos nunca vista hasta ahora.