AEI 521 - La tecnología es necesaria pero no suficiente

Cuando emprendemos un nuevo proyecto industrial buscamos las tecnologías más adecuadas para poder alcanzar nuestros objetivos. Bajo la órbita de Industria 4.0, se han popularizado multitud de técnicas como: IoT, big data, realidad aumentada, inteligencia artificial, machine learning, y otras muchas. Pero a veces estas innovaciones nos deslumbran, y dejan en segundo plano el componente esencial de cualquier proyecto: el equipo de personas que lo va a dirigir y ejecutar.

Algunas veces las innovaciones tecnológicas nos deslumbran y dejan en segundo plano el componente esencial de cualquier proyecto

En la última edición de Advanced Factories (Barcelona, Marzo 2020), Henrik Von Scheel, considerado el creador del concepto Industria 4.0, presentó una interesantísima conferencia respecto la creación de valor mediante la transformación digital. En ella indicó que muchas empresas y profesionales en nuestro país están obsesionados por la tecnología; y la transformación digital no es solo tecnología, la pieza central de la Industria 4.0 son las personas, que por supuesto tienen que utilizar la tecnología.

Hace años, para el desarrollo de un proyecto, la importancia de las personas participantes era más evidente. Estoy hablando de cuando hacía falta muchas horas de ingeniería para programar un sistema automático. Cuando operar con un sistema de control implicaba usar una terminal de programación especializada, que pesaba más de 20 kg, y no estaba al alcance de cualquier empresa. Afortunadamente, con el paso del tiempo, el acceso a los sistemas de control se ha democratizado, eliminando esas importantes barreras de entrada. Hoy con un PC, una tablet o un teléfono inteligente y un cierto software podemos interaccionar con diversidad de sistemas.

Quizás, precisamente por esta facilidad de acceso, hay quien considera las labores de ingeniería más sencillas que antes, y precisamente son todo lo contrario; si queremos buenos resultados necesitaremos una elevada especialización y profesionalidad del personal de proyecto.

Para un concierto musical no bastan buenos instrumentos, antes de nada es imprescindible un compositor que cree una melodía y la plasme en una partitura. Seguidamente son indispensables diversos músicos con formación especializada, y finalmente un director con la experiencia necesaria, que después de múltiples ensayos, es capaz de sincronizar todos los sonidos, reproduciendo la música esperada. En la industria ocurre algo parecido, necesitamos directores de proyecto con la formación y experiencia adecuada, tanto técnica como de gestión de equipos. Es básico que puedan interpretar los objetivos de un proyecto, plasmarlos en documentos de especificaciones, desplegarlos en diseños, dirigiendo los desarrollos de software correspondientes, supervisando las pruebas del sistema y consiguiendo una puesta en marcha eficiente. Y además, equilibrando los tres grandes pilares de un proyecto: Coste-Calidad-Tiempo. Todo un reto.

Necesitamos directores de proyecto con la formación y experiencia adecuada, tanto técnica como de gestión de equipos

No podemos olvidar las enseñanzas Peter Drucker, reconocido experto en gestión empresarial, que abogaba por el papel del director de proyecto como pieza clave, por encima de la tecnología, para alcanzar los resultados esperados. También Tom Peters, consultor especialista en proyectos, incide en este tema indicando: “Los proyectos asombrosos necesitan personas igualmente asombrosas”.

Antoni Rovira
Responsable Arquitecturas Integradas y Software en Rockwell Automation