Para la analista estadounidense Grand View Research, se espera que el mercado mundial de sensores de temperatura alcance un total de 6.130 millones de dólares a finales de 2020. Este crecimiento será potenciado por la electrónica de consumo y la industria del automóvil.
Los diferentes equipos de uso común, tales como sondas resistivas (RTD), termopares, dispositivos de expansión de líquido, diodos de silicio y sensores infrarrojos, también se aplican en procesos industriales –la temperatura es la primera dimensión física en cuanto a número de puntos de medición-, en instalaciones de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) en el control ambiental, en dispositivos médicos, en aplicaciones de manipulación de productos químicos, etc.
En su informe, la firma de investigación identifica como innovaciones en el campo de los sensores de temperatura la miniaturización, los avances tecnológicos y la obligación de garantizar la seguridad y los escenarios regulatorios favorables.
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