De la nevera a tus manos: cómo la tecnología revoluciona la producción de helados

Es verano, las temperaturas se disparan y, para la mayoría de la gente, la forma de combatir el calor es con... ¡helados! Cada año, según un estudio de Constanza Business & Protocol School, los españoles consumen al año 495.000.000 de litros de helado y lo consideran como uno de los aperitivos favoritos. Pero antes de que este postre helado llegue a los consumidores, hay mucho que planificar y producir. De hecho, desde los productores de helado que gestionan su suministro hasta la previsión y el tratamiento de las tendencias cambiantes, preguntas como qué y cuándo producir, necesitan respuestas.

Evitar el exceso de inventario manteniendo existencias suficientes para el tiempo cálido y no esperar a que empiece el verano para fabricar helados, es uno de los principales retos. El proceso comienza con la planificación y creación de inventario a finales de año mediante la aplicación de previsiones fiables de la demanda y una sólida gestión del inventario y la producción. La gestión de alimentos congelados en la industria del helado se beneficia de los sistemas de gestión de almacenes para reducir el movimiento en los congeladores, mantener la temperatura, obtener una visibilidad completa del inventario, supervisar el flujo de trabajo y gestionar las devoluciones, la recepción y la preparación de pedidos.

Las aplicaciones DELMIA de Dassault Systèmes para la planificación y optimización de la cadena de suministro (SCPO) dotan a la industria heladera de una planificación y optimización basadas para este tipo de complejos procesos empresariales. Desde la cadena de suministro, pasando por la logística y las diversas operaciones de mano de obra. En definitiva, un perfecto equilibrio entre el cumplimiento de los pedidos, el inventario y la producción, al tiempo que se intenta mejorar la eficacia operativa siendo más respetuosos con el medio ambiente.

Los sistemas de software de gestión como DELMIA permiten a los supervisores tener una visión completa de las operaciones y las máquinas, garantizando que los procesos se desarrollen sin problemas para cumplir tanto la normativa de la cadena de frío, como las expectativas de los clientes. Así se garantiza que las operaciones de la cadena de suministro estén preparadas para el futuro, maximizando su eficiencia y agilidad a la vez que se encuentran formas más inteligentes y rápidas de optimizar los costes.

En los últimos años, la distribución y producción de helados se ha reinventado con los avances tecnológicos, lo que resulta increíblemente beneficioso ante las interrupciones u otros problemas que puedan surgir a lo largo del proceso.